Tus Tiempos Están en Mis Manos.
Tus Tiempos Están en Mis Manos. -Mis sueños se desvanecen. -Los anhelos de mi corazón se ven lejos de realizarse. -No creo que algún día alcance los logros que me había propuesto. -Cada día que pasa, siento que camino en la dirección opuesta a mis deseos más grandes. -Todos mis esfuerzos para alcanzar las cosas que quiero han sido en vano. -Mis habilidades, mi conocimiento, mi experiencia y mi preparación no han podido abrirme ni una sola puerta. -Entre lágrimas, desesperación, frustración e incertidumbre pienso en mi futuro y me aterro. Calla de una vez esas voces poniendo tu confianza en Dios. Hazlo de inmediato porque Dios te recuerda hoy: “Tus tiempos están en mis manos”. En Eclesiastés 3, Se menciona que tanto los momentos malos como los buenos tienen su tiempo debajo del cielo. Cada uno ocurrirá en su momento preciso. Los tiempos buenos siempre serán buenos, pero los tiempos difíciles son los más que nos enseñan y nos hacen crecer. El tiempo en que somos a...